Espaço Em Branco ©

Director/Actores/Actrices/Crupieres/Chóferes/Niños: Los mismos de las dos entregas anteriores menos 3, el que hace de Venom, el que hace del Hombre de Arena (feo como un calcetín sudado) y una tía con tetucos bastante cachondita.

Guión: Un mono albino que se encargó de trazar la raya

Música: De vez en cuando

Fotografía: Canon de 8.9 megapíxeles, 677 €

Vestuario: Sí, todos van vestidos

Sinopsis: Peter Parker es Spiderman, su novia (Mary Jane) lo sabe y su coleguita enfadado (Harry Osborn) también. Al principio se dan de hostias y al Harry se le va la pinza un mínimo. Después hay rollito cómo me mola follar con un superhéroe, que más tarde se enturbia porque las perspectivas laborales de una pelirroja que no la chupa en Nueva York no son muy alagüeñas para entrar con buen pie en Broadway. A continuación SE NOS presenta a uno de los supervillanos de esta 3ª parte: el Hombre de arena (Flint Marko), que busca curar a su hijita enferma escogiendo el camino de las fechorías dinerarias (como los gitanos pero con motivo aparente). El cómo se convierte en Hombre de arena es casi más que curioso, digno de la física de la cienciología para niños de 4º de primaria. En un momento de la película hay como 5 o 6 tramas paralelas y uno se pregunta si años de ingesta alcohólica inconsciente y temeraria no habrán dañado nuestra capacidad de análisis y retención memorística de datos. También aparece el ser extraterrestre simbionte que cae de un meteorito y que se desplaza como un blandiblú negro (si a nadie le parece raro no voy a ser yo el que se haga preguntas) y que convertirá a Peter Parker en un poderoso aunque inestable superhéroe hecho por ordenador. Las secuencias de cómo Peter intenta librarse del poderoso influjo de ese "ser" son de lo mejorcito de la película (va en serio). Después lo de siempre, la batalla entre el bien y el mal, nadie folla, dos besos mal dados, un escote prominente que se queda en un simple: "ay! si enseñase el tetuco izquierdo aunque sólo fuese ése...", tres o cuatro gritos de "ay! a ver si me voy a caer de este 30º piso, aunque no creo porque vivo con Spiderman" y poco más. Gente llorando (pero no eran superhéroes?) y movidas de convivencia con enseñanzas para la vida de las (conformistas) personas de perfil medio.
Al final suceden una serie de acontecimientos que dejan la película en el aire. Es decir, que habrá Spiderman 4.

Lo mejor: Imágenes curradas por ordenador, tres paridas con semi-gracia, policías siendo apalizados, un gato bizco (se ve durante 0,5 segundos en una esquina de la imagen, pero se ve, y está berraco) y la gente aplaudiendo que se escucha en el DVD-Screener cuando pensaban que ya había acabado el filme, pero aún quedaban 56 segundos.

Lo peor: Los trajes de Spiderman, la fulana semi muerta que hace de tía de Peter y que da "yu-yu" (ni cocina, ni ve la tele, ni duerme... qué coño hace una pensionista en Nueva York entonces?), no hay folleteo y casi hacia el final sale la bandera norteamericana ondeando detrás de Spiderman (hacía falta? Los yankis siempre piensan que sí, pero claro, son retrasados).

Ni fu ni fa: El Hombre de arena no hace castillos de arena con la po...

Puntuación de Espazo en Branco: 3,5 Pako Vasquez sobre 5